Un cambio desde adentro de los Tribunales. Con el ciudadano como prioridad. Con una perspectiva del conflicto que incluya la dimensión humana. Con conciencia de que la Justicia no goza de la credibilidad que necesita para cumplir el rol que le ha encomendado la Constitución… Estos parámetros integran la transformación que Alberto Ítalo Balladini propuso en la primera actividad académica organizada por el Consejo Asesor de la Magistratura de Tucumán (CAM).
En la conferencia titulada «Hacia un servicio de justicia eficaz y eficiente para el ciudadano», el ex magistrado rionegrino recordó a la audiencia -consejeros, autoridades judiciales, jueces y funcionarios- que la imagen pobre que la ciudadanía tiene de la Justicia no se contrarrestra con normativas y acordadas.
«Debemos superar esa situación construyendo un Poder Judicial que llegue a la gente y consiga que el ciudadano común se sienta satisfecho con sus Tribunales», afirmó, en el marco de la apertura del Ciclo de Actividades Regionales 2012 que organizó el CAM, la Corte Suprema de Justicia de Tucumán (CSJT), la Junta Federal de Cortes y Superiores Tribunales de Justicia de las Provincias Argentinas y de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (Jufejus), y la Red de Escuelas Judiciales de las Provincias Argentinas y de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (Reflejar).
Tras la conferencia, Daniel Posse, presidente del órgano de selección de jueces, firmó un convenio de cooperación académica con Luis Francisco Lozano y Fernando Royer, sus pares de Jufejus y de Reflejar.
Desprestigio contagioso
El pueblo no se siente partícipe de las decisiones judiciales, según sostuvo Balladini, que el año pasado dimitió a su cargo de vocal del Superior Tribunal de Justicia de Río Negro.
El también ex titular de Jufejus explicó que este fenómeno obedece a la tendencia de la Justicia a atenerse a las formas y no atender el sustrato humano que subyace en todo pleito.
«Esta actitud nos desconecta con la sociedad y con la realidad. Por eso queremos jueces activos y comprometidos, que participen de los problemas de la gente y que se sientan parte de esos mundos aunque no les pertenezcan», expresó el ex magistrado en el Centro de Especialización y Capacitación del Poder Judicial de Tucumán.
En una intervención alineada con la línea crítica y autocrítica que impulsa Ricardo Lorenzetti (presidente de la Corte Suprema de Justicia de la Nación), Balladini ha incitado a los jueces a ser activistas de la pacificación social y no meros espectadores. En ese sentido, el ex magistrado ha convocado a desterrar la morosidad judicial y a reconocer que en los nuevos tiempos de la Justicia no tienen cabida frases burocráticas como «vuelva usted mañana».
Postura receptiva
Balladini, además, invitó a asumir una posición receptiva de las minorías frente al avance de la mayoría. Y, tras reconocer el valor de las asociaciones que agrupan a jueces, funcionarios y empleados judiciales, advirtió que no todo es incremento salarial y que estas asociaciones deben luchar por mejorar el servicio. «No pueden apañar al mal magistrado… La ciudadanía percibe esa complicidad y protección hacia quien no tiene que estar en el sistema», aseguró el ex titular de Jufejus. Luego, el ex magistrado agregó: «ciertos jueces parecen alquilados por el poder político de turno y el sector que los representa jamás hace una crítica. Este factor de desprestigio contagia a los buenos jueces, que tienen vocación de servicio y viven su función como un apostolado».