Washington y Colorado se transformaron en los primeros estados en aprobar la legalización y regulación de la marihuana de manera similar a la del alcohol. Estamos frente a un gran triunfo por sobre el absurdo prohibicionismo y la nefasta guerra contra las drogas que toma lugar en todo el mundo.
El pragmatismo con el que los electores concurrieron a las urnas y aprobaron la regulación entrega una fuerte señal al debate latinoamericano que necesitaba que desde Estados Unidos se concretaran avances que acompañaran las batallas que diferentes líderes de la región han dado en los últimos meses. Juan Manuel Santos, Otto Pérez Molina y José Mujica en reiteradas oportunidades habían repetido que se sentían solos.
En el mes de Abril y durante la Cumbre de las Américas en Cartagena, el Presidente Obama dejó en claro que Estados Unidos no estaba de acuerdo con la legalización de la marihuana pero si que estaba dispuesto a abordar el debate. Sin embargo, las decisiones tomadas por los electores de dos estados en el día de ayer, ponen en jaque las posturas prohibicionistas y de cierta manera fuerzan a que el gobierno federal partícipe de manera directa en una discusión de extrema importancia para América Latina. El actual enfoque es responsable de miles de muertes, hacinamiento carcelario, violación de derechos humanos y millonarios gastos. Mientras tanto, el crimen organizado se ha empoderado y el consumo ha aumentado.
Que dos estados den inicio a un proceso que permita regular el uso de marihuana de similar manera al alcohol abre la ventana para que otras naciones finalmente puedan contar con ejemplos tangibles de lo que serian los modelos regulatorios que se están debatiendo en la región. No olvidemos que una de las más grandes interrogantes que planteaba la opinión pública y las élites latinoamericanas a la propuesta del Presidente de Uruguay para la legalizar la marihuana, era que no existían casos similares desde donde se podría evaluar los reales efectos que estos modelos tendrían.
Si bien países como Portugal y Holanda aparecían como los modelos a observar, este último dio un paso atrás al limitar el acceso de cannabis solo a sus ciudadanos. Por otro lado Portugal tras 12 años de despenalizar el uso de drogas y buenos resultados, en ningún momento logró abordar un modelo regulatorio y amplio como el que se espera en Colorado, Washington y Uruguay.
La legalización de la marihuana para uso recreativo en estos casos implica la correcta regulación del consumo y comercio; junto con la imposición de impuestos a la venta y políticas de control. Bajo este escenario los estados podrán enfocarse en usar los recursos recaudados en programas de educación y prevención y terminar con el absurdo gasto policial y judicial que significaban miles de arrestos y detenciones. Es más, la regulación de la cannabis tendrá impactos directos sobre la población carcelaria, los niveles de estigmatización hacia minorías, jóvenes y mujeres y por sobre todo sobre los derechos de las personas.
Colorado y Washington se suman a una ola de reformas en torno a políticas de drogas que han tomado lugar en los EEUU. En el día de ayer también Massachusetts pasó a ser el estado numero 18 donde la marihuana se legaliza para usos medicinales.
Pero a pesar del éxito en las urnas, ambos estados enfrentan la incertidumbre de ver como el re electo Presidente Obama y el Gobierno Federal reaccionarán. Durante su primer mandato, Obama fue bastante duro con las leyes de drogas, dando pasos atrás con respecto a sus promesas electorales. Es de esperar que en este período, y al no tener la presión de la re elección, deje que ambos estados sigan por su camino pragmático permitiendo no solo que sirvan como un laboratorio para modelos regulatorios, sino que también para que otros estados y naciones de la región sigan su ejemplo.
La regulación de la marihuana es la única forma honesta y eficiente de proteger a los consumidores, educar y prevenir adecuadamente, disminuir el poder y ganancias del crimen organizado y por sobre todo de ejecutar políticas publicas eficientes que se basen en la ciencia, la salud y los derechos humanos. Mientras tanto, Latinoamérica observa con atención.
fuente http://www.asuntosdelsur.org/colorado-y-washington-legalizan-la-marihuana-latinoamerica-observa/